
Desde su génesis la nueva ley, que precisamente entra en vigencia hoy 11 de noviembre de 2018, fue formulada como una alternativa a las difíciles condiciones de desplazamiento a la que se ha visto enfrentado el tránsito durante las últimas décadas. El crecimiento en promedio del parque automotriz de un 19,8% a nivel nacional, realidad a la que la región del Maule no escapa, generó un aumento de la accidentabilidad, utilización de un mayor tiempo en los viajes así como también el ingreso de otros modos de transporte en las calles y carreteras de nuestro país.
La problemática se genera cuando cada vez son más los modos que comparten las mismas arterias, sin que hasta ahora existiera una norma que determinara los derechos y obligaciones desde el peatón hasta los medios motorizados, a modo de ejemplo, los ciclistas, eternos luchadores por sus espacios viales, se encontraban en una evidente desventaja que hoy con la Ley de Convivencia de Modos comienza a equilibrarse, otorgándole a ellos y los otros medios definidos como “ciclos” el uso exclusivo las ciclovías, así como también retirándolos de las veredas de nuestra ciudad, donde su paso se interpone con la seguridad del peatón.
Otro de los puntos que navegaban en la incertidumbre y que Ley de Convivencia de Modos aborda es la regulación de vehículos como los triciclos eléctricos popularmente llamados “Toritos” este tipo de transporte no era reconocido por ley alguna como “vehículos” situación que no permitía fiscalizar sus condiciones técnicas así como tampoco a sus conductores; lo mencionado cambia radicalmente con la nueva norma quedando obligados a obtener una revisión técnica especial, a través de inspección ocular en las Plantas de Revisión Técnica (PRT) a partir de hoy.
La Ley de Convivencia de Modos viene a ser un aporte al orden urbano, a la seguridad vial, incluso a la igualdad ante la ley consagrada en la constitución política del país; haciéndose imperativo que los ciudadanos conozcan la nueva disposición para generar el cambio en la cultura vial de calles y carreteras que es el espíritu central de la nueva ordenanza.
